El humilde

21 de Diciembre, Miramar.

Ha trascurrido una cantidad innumerable de días  en los cuales he rescindido mis biografías, el motivo acae a los exámenes de fin del ciclo académico que espero que ustedes sepan disculpar y me sigan apoyando.

Durante los meses venideros disminuiré mis escritos, para que no se pierda la esencia de aquel primero que relate, y así sacar más provecho a los nombrados.

Disponía de un corto plazo para hacer que mis decisiones valieran la pena, cuando decidí optar por mi pequeño viaje a la capital de mi país, La Plata.

El viaje se inició a las 00:45, en la cual me debía presentar 20´ antes de la ahora citada en la terminal de ómnibus en Miramar, Pcia. de Buenos Aires, nervioso y expectante a  conocer dicha ciudad. El viaje fue agotador descendí del colectivo a las 06:45, en la cual no estaba dispuesto a abordar un taxi en busca de mi objetivo, sino de caminar la cantidad de calles que haya en mi recorrido.

Una vez comenzado mi caminata, tome contacto con una persona que me oriento, así que antes de continuar dispuse a tomar algo pues no había desayunado aún, por lo que opte por consumir un Latte, vale decir- chocolatada-  en la calle; continuando mi recorrido pase por lugares que en otra entrega mencionare, luego de una horas del recorrido  a modo turista diría yo, arribe a la facultad de Cs Medicas de la Universidad Nacional de La Plata, la primer imagen que mi sensorio recibió fue decir “Maravilla de pie” , aquella infraestructura edilicia era muy grande ,con un poblado de jóvenes estudiante  los cuales pensaron que pertenecía allí y ni se deslumbraron al verme. Cuando entre visualice un mapa de la facultad, los cuales decían como llegar a diferentes destinos; subí por la primer escalera que observe y camine por los pisos, hasta que llegue a la llamada aula “Dr. Rene Favaloro”  lo que evoque primeramente fue bypass cardiaco e incondicional persona.

Rene Gerónimo Favaloro nació el 12 de julio de 1923 en La Plata, el cual realizo sus estudios secundarios en el Colegio Nacional “Rafael Hernández” y luego continuos sus estudios universitarios en la UNLP  recibiéndose de médico.

Desmedido en su humildad, y a poco de recibirse  suplió una vacante en la localidad de Jacinto Araoz en la Pcia de la Pampa, allí durante los doce años que trabajo, el aspecto médico – social lo marcó  para siempre. Luego de   varias lecturas sobre, la cirugía torácica, la cual estaba en pleno desarrollo,  empezó a despertar su atención. Fue José María Mainetti uno de sus mentores que le aconsejo que el lugar donde podría aprender sobre la cirugía torácica era la Cleveland Clinic ,a la cual René viajo y comenzó primero como residente y luego colaborador en las cirugías.

Una vez que los años hicieron que Favaloro convirtieran en una eminencia y luego de su máximo aporte a la cardiología: El Bypass cardiaco, el cual lo llevo al reconocimiento internacional. Cuando este retorno a la Argentina continuo trabajando en el Sanatorio Güemes, en la cual realizó numerosas intervenciones quirúrgicas y su primer trasplante cardiaco

El nombrado se negó  a las innumerables propuestas laborales decidió permanecer en  su  país , al que refería ”este país me ha dado todo”; y  así posibilitar las  construcción de su entonces proyecto denominado “Fundación Favaloro” refiriéndose que era de la comunidad para la comunidad.

Ya concretado dicho proyecto Rene se fue sumergiendo en una deuda extensa pues dicha entidad no recibía  ayuda económica, y siendo así paralela a la crisis nacional denominada "crisis del 2001",vale decir - se venía gestando pero estalló en el 2001,el mismo recurrió a enviar una carta, dirigida al entonces presidente de la nación Fernando de la Rúa del cual no recibió ninguna respuesta; cansado de la  burocracia  decidió tomar una decisión, el 29 de julio del año 2000 se suicidó de un disparo al corazón. Su carta mencionaba que la forma para que se tomara consciencia era mediante su muerte.

El triste final de nuestro querido medico Favaloro, a lo que a muchos concientizo a otros no demasiado, pero dejó un legado y reconocimiento mundialmente.

El mismo consagrado en su trabajo, nunca hecho atrás sus principios trasmitidos por sus padres, y condujo su vida de manera recta e intachable.

                                                                                     Autor: Trigo, Leandro. A

  Bibliografía

De la Pampa a los Estados Unidos, René G.Favaloro, 2007